La industria automotriz china cuenta con un ecosistema de 455 mil empresas vinculadas al sector, entre ingentes proveedores tecnológicos, manufactureros, cadenas de suministro y una extensa red de fábricas y medios logísticos.
Además, China ya es el mayor eje de fabricación de autos eléctricos en el planeta y el mayor en infraestructura de recarga instalada.
Los pronósticos dan lectura que país asiático será la primera nación del planeta en alcanzar la electromovilidad interna entre un 50% para el año 2030. Considerando como el segundo mayor país en población, es un caso de éxito jamás visto.
En efecto, las metas alcanzadas tienen la mira fija en una expansión global con específicos destinos, los mercados en euroasiático, africano y latinoamericano.
El dragón chino ha logrado la eficiencia y la excelencia superando a los mercados en Japón y Europa, para colocarse como la nación que domina el sector. No obstante, no todos celebran ese éxito.
Akio Toyoda, presidente y exdirectivo ejecutivo de Toyota, expreso en un evento empresarial celebrado al inicio del año, que los vehículos eléctricos nunca alcanzarán el 30% de la cuota del mercado mundial.
Explicó sobre la pluralidad que será dominante aún por los automóviles de combustibles fósiles e híbridos, junto con los vehículos de batería con combustible a base de hidrógeno. Una de las mayores apuestas del país nipón.
“¿Cómo pueden ser los vehículos eléctricos el futuro cuando mil millones de personas en la Tierra no cuentan con electricidad?”, dijo Toyoda. “Quienes deciden son los consumidores, no las regulaciones ni la política”, agregó.
Tesla a la baja
Las palabras de Toyoda, claramente, se sustentan en la desconfianza en las baterías de iones de litio y por el desplome de los vehículos eléctricos. La demanda de unidades ha caído en los 7 últimos meses.
Esta cara, que puede ser vista como un trastorno en los márgenes considerables, está atada a diferentes dinámicas por los giros de timón y asuntos geopolíticos que el mundo ha dado en tiempo récord.
Las restricciones comerciales y arancelarias entre el gigante asiático y las naciones occidentales -EEUU- en los últimos 6 años. No obstante, la mega factoría de Tesla (empresa símbolo anglosajona) ha encontrado fortaleza en el mercado interno chino compitiendo con las marcas de autos nacionales, algo que aún no es equiparable en la nación norteamericana.
China no solo será el país de los autos eléctricos, sino también el mayor exportador
Akido Toyoda, como presidente de la empresa con mayores ventas de autos a nivel global y una de las más vanguardistas en adopción de tecnologías, cree que aún esta muy lejos el éxito de los autos eléctricos por diferentes factores, tales como la cultura y la rentabilidad.
“No puedes ir a decirle a un alemán, olvídate las innovaciones creadas en los aceites sintéticos, algo que esta muy arraigado en su cultura y además, donde aún se está desarrollando tecnologías que son muy eficientes contra los impactos al medio ambiente”
Pero más alla de las palabras del Toyoda, el gigante asiático piensa distinto. No olvidemos que China logró algo épico e historico para humanidad: sacar a 800 millones de personas de la pobreza. En el imaginario inmediato, la industria de los autos eléctricos es una apuesta y eje de desarrollo para el dragón rojo.