Falleció como un billonario a los 56 años de cáncer pancreático y, en su lecho de muerte, éstas fueron sus últimas palabras:
“Alcancé la cima del éxito en el mundo empresarial. Mi vida es el epítome del éxito en la opinión de otros.
Pero, no tengo nada por qué ser feliz excepto por el trabajo. Al final, la riqueza es solo una realidad de vida a la que estoy acostumbrado.
Fue entonces, recostado en un lecho de muerte recordando mi vida entera, que me di cuenta que de todos los reconocimientos y riqueza de la que estaba orgulloso, se volvió un sin sentido de cara a una muerte inminente.
Puedes contratar a alguien que conduzca por ti, a alguien que haga dinero para ti; Pero no puedes hacer que alguien más tome la enfermedad por ti. La pérdida de sustancia puede ser encontrada. Pero hay una cosa que nunca podrá ser encontrada cuando se pierda “la vida”.
Cuando una persona entra a la sala de operaciones, descubrirá que allí hay un libro que aún no se lee: “El libro de vivir saludable”. No importa en qué etapa de la vida estés ahora mismo, con el tiempo enfrentaremos el día cuando las cortinas caigan. Aprecia a la familia que te ama, ama a tu cónyuge, ama a tus amigos, sé amable contigo mismo.
A medida que envejecemos, gradualmente nos damos cuenta, que usando un reloj de $300 o $30, todos me dicen la misma hora.
Ya sea que carguemos una cartera/bolsa de $300 o $30, el dinero dentro es el mismo.
Ya sea que conduzcamos un carro de $150 mil o uno de $30 mil, la carretera y la distancia son la misma y alcanzamos el mismo destino.
Ya sea que bebamos una botella de vino de $300 o una de $10, la resaca es la misma.
La casa en que vivamos, ya sea de 300 pies cuadrados o 3000 pies cuadrados, la soledad es la misma.
Se darán cuenta que tu verdadera felicidad interior no viene de las cosas materiales de este mundo.
Ya sea que vayas en primera clase o en la económica en el avión, si el avión colapsa, irás con el flujo.
Por ende, espero de qué puedan reconocer que cuando una pareja, amigo, hermano, con el que hablas, ríes, cantas, hablas sobre el norte, este, sureste o el cielo y la tierra… ¡eso es verdadera felicidad!”
Cuatro hechos innegables de la vida:
1. No eduquen a sus hijos para que sean ricos. Edúquenlos para ser felices. Por ende, cuando crezcan, sabrán el valor de las cosas, no el precio.
2. Las palabras para el mejor premio en Londres… “Toma tu comida como tu medicina. De otro modo tendrás que tomar medicamentos como tu comida.”
3. La persona que te ama nunca te dejará por alguien más porque incluso, si hay 100 razones para rendirse, él o ella hallará la razón para aferrarse. Hay enormes diferencias entre la gente.
4. Solo unos pocos realmente lo entienden. Fuiste amado cuando naciste. Serás amado cuando mueras. Entre tanto, ¡tienes que manejarlo!
Nota: ¡Si quieres ir rápido, ve solo! ¡Pero si quieres ir lejos, vayan juntos!
Steve Jobs 1955 – 2011
Seis máximos doctores en el mundo:
1. Luz solar
2. Descanso
3. Ejercicio
4. Dieta saludable
5. Confianza en ti mismo
6. Amistades