La epidemia de obesidad es el mayor reto de salud pública a nivel internacional. Actualmente, más de dos mil millones de personas en el mundo, tanto adultos y niños, tienen sobrepeso u obesidad. Este padecimiento colectivo, crece gradualmente por todo el planeta.
Se calcula que a finales de la actual década, 250 millones de niños tendrán problemas de salud a causa de la diabetes tipo 2, algo poco usual en las décadas anteriores.
Ningún país ha logrado detener este fenómeno global. De continuar esta tendencia, significará que la mitad de los humanos tendrán sobrepeso o serán obesas para el año 2030.
Las cifras en México
La población en México convive en paralelo a un ambiente obesogénico. Es decir, se ve rodeado de un entorno favorable para el desarrollo de la obesidad y enfermedades relacionadas al sobrepeso.
El abandono de los alimentos naturales, desplazados por los alimentos procesados y las estrategias de puntos de venta de productos, dispararon la obesidad y las enfermedades relacionadas a este padecimiento desde el año 2000 a la fecha.
Existen 1.5 millones de puntos de venta de bebidas azucaradas y comida chatarra por todo el territorio nacional. No existe logística similar en alguna otra nación.
Hoy se calcula que el 73% de la población es obesa o tiene algún tipo de sobrepeso. Además, el 10% de la sociedad padece diabetes, una cifra alarmante y la principal causa de muerte en el país. Este indicador pone en riesgo al sistema de salud publica y la viabilidad financiera para el sector.
A pesar de la implementación de un etiquetado obligatorio [2017] en los productos generados por la industria de la comida procesada, un mexicano bebe la cantidad promedio de 144 litros de refresco al año, un récord mundial.
Las poblaciones de bajos ingresos, son los principales consumidores de comida industrializada. El accesible costo y precio de los productos procesados, hace caer a la población en un problema entre el interés de la salud y el interés económico de las grandes empresas del sector.
Por otro lado, factores como violencia, exclusión, bajos ingresos; la pérdida de espacios deportivos y el mal diseño de las ciudades, también contribuyen a la inactividad física, ansiedad y desordenes alimenticios en la población.
A mediano y largo plazo, se buscan implementar nuevos enfoques e innovación, que logren mermar los efectos de la obesidad en el país.
Enfoque en la rehabilitación metabólica
El espíritu emprendedor siempre busca caminos, nuevas formas de crear valor y ayudar a resolver problemáticas. Con los antecedentes y las cifras sobre la obesidad en el país, jóvenes visionarios plantean modelos de negocio con modernos enfoques y novedosas perspectivas.
Jessica Castro es nutrióloga y profesional de la salud, especialista en metabolismo, educadora en diabetes y nutrición deportiva.
Pulse Coder se dio la tarea de buscar a nuestra emprendedora del mes de octubre. Amablemente nos concedió esta charla.
“Neexa ofrece los servicios de nutrición clínica y deportiva; ejercicios terapéuticos y cuenta con gimnasio clínico. También ofrece cursos virtuales sobre alimentación y actividad física”.
En abril del 2022, comenzó su camino en el emprendurismo. Junto a su colega, el nutriólogo José Ramón Cortez, fundaron la clínica Neexa, un espacio que tiene como objetivo principal ayudar a personas en la prevención de la salud y el bienestar.
“Por el ritmo de vida actual, el sedentarismo, una alimentación no adecuada y desequilibrios hormonales, muchas personas desarrollan enfermedades como la diabetes tipo 2, hipertensión, hipotiroidismo, etc”.
Neexa es la combinación de las palabras nutricion, ejercicio especializado y xalapa
“Tenemos un servicio personalizado para cada uno de nuestros pacientes, pero lo que nos hace diferenciarnos, es nuestro enfoque sobre la rehabilitación metabólica“.
Después de las dificultades creadas por una pandemia global, la sociedad en confinamiento experimento un aumento de peso, ansiedad y estrés. Ahora es un buen momento para iniciar o retomar los rutinas deportivas y un programa nutricional que nos ayude a regular nuestro peso, y de esta manera, dar prevención a la salud.
“Al inicio hacemos es un diagnóstico del paciente. Con los datos obtenidos, creamos un historial clínico que nos permite desarrollar un plan, trazar objetivos, programar sesiones; todo ello con una guía nutricional, dietas personalizadas y un régimen de ejercicios especializados que puedan devolver la salud y calidad de vida de nuestros clientes”.
Jessica no es una nutrióloga improvisada. Anteriormente a su nuevo proyecto, atendía una cartera de pacientes desde su consultorio propio. Además, instruía a profesores de la universidad veracruzana en el ámbito de la alimentación saludable.
Con años de experiencia y con los desafíos que significa emprender después de una pandemia planetaria, su ánimo es alto. La oportunidad de ofrecer sus conocimientos a todos aquellas personas que padecen problemas de salud por sobrepeso, es un reto alentador que lo encara con gusto. Ahora, como una joven empresaria, se ha convertido en una persona multidisciplinaria.
“Nuestro slogan es nutrición, ejercicio y salud. Es importante decirle a nuestros pacientes que tiene que hacer deporte, ejercitarse, salir del sedentarismo y dedicar tiempo a la actividad física. Solo de esa manera, podemos revertir los efectos negativos de la perdida de la masa muscular. Nuestro cuerpo está diseñado para trabajar. Tenemos músculos que necesitan estar en constante actividad”.
También ha desarrollado ciertas ideas de marketing para atraer a más pacientes. Con conceptos muy claros, publicidad y sobre todo, estrategias por recomendación, Neexa se abre camino para convertirse en una clínica de salud emergente en la ciudad.
Por lo tanto, en Pulse Coder deseamos todo el éxito a la clínica neexa y a sus fundadores.
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